Se estima que hay más de 3000 especies de palmeras, pero ¿cuántas más? No se sabe. Cada cierto tiempo se descubren de nuevas, y de estas, todavía pasarán más años hasta que sean conocidas a nivel mundial.
Eso fue lo que pasó con la Juania australis, una palmera relativamente común en Chile, pero que fue totalmente desconocida para el resto del mundo hasta la primera mitad de la década de los 2000. ¿Te apetece conocerla?
¿Cómo es?
Taxonomía
- Reino: Platae
- División: Magnoliophyta
- Clase: Liliopsida
- Subclase: Commelinidae
- Orden: Arecales
- Familia: Arecaceae
- Subfamilia: Ceroxyloideae
- Tribu: Ceroxyleae
- Género: Juania
- Especie: Juania australis
Juania australis es el nombre científico de una palmera originaria del Archipiélago Juan Fernández en la Isla Robinson Crusoe, a unos 650km al oeste de las costas de Chile. Fue descrito primero por Carls Friedrich Philipp von Martius como Ceroxylon australe en 1849 y luego transferido al género Juania por Carl Georg Oscar Darude y Josep Dalton Hooker y publicado en Rep. Kew Gard en 1884.
Popularmente se la conoce como palmera chonta o chonta.
Características
Se trata de una palmera dioica de tronco único y cilíndrico que mide de 25 a 30cm de diámetro que alcanza una altura de 10 a 15 metros. La corona está formada por 14-20 hojas pinnadas de 100 a 130cm de largo cuyos foliolos miden unos 2cm de ancho y no más de 40cm de largo. Las flores se agrupan en inflorescencias racimosas y péndulas de un metro de largo. Los frutos son redondos y lisos, de 1,6 a 1,8cm de diámetro, y contienen una semilla elipsoidal.
Está en peligro de extinción por pérdida de hábitat.
¿Qué cuidados especiales necesita para vivir?
La Juania australis es una palmera que debería de ser muy fácil pero en realidad es de difícil cultivo. Necesita un clima suave, con temperaturas de no más de 25ºC, y un suelo que drene bien y rápido el agua. Por eso, lo ideal es tenerla en maceta en semisombra con sustrato de cultivo universal mezclado con perlita a partes iguales por ejemplo, y plantarla en el suelo cuando haya alcanzado los 50cm de altura o más.
Si hablamos del riego, hay que regarla cada 2-3 días en verano y algo menos el resto del año. Además, será conveniente abonarla durante los meses cálidos con abonos como el guano de murciélago que es rico en nutrientes siguiendo las indicaciones especificadas en el envase del producto.
Resiste heladas de hasta los -5ºC.